El comedor del mercado municipal número 1, azotado también por la inseguridad. Foto archivo.
La ola de asaltos callejeros en Asunción, impacta en pequeños negocios del centro y microcentro, obligando a varios de ellos a recortar horarios para evitar el asedio de marginales.
Uno de estos afecta al conocido Mercadito Municipal número 1, ubicado en Independencia Nacional y Manduvirá. Sitio obligado para clientela proveniente de todos los estamentos sociales por la calidad y bajos precios de sus comidas. El lugar ya está inmune a azotes de los “chespis” que aprietan a los que concurren al sitio, a la hora en que llega la noche.
“Asaltan a nuestros empleados y clientes, es insostenible, el centro de Asunción está muriendo, la inseguridad avanza y las autoridades no dan garantías”, señaló Delia Cáceres. Ella es una de las propietarias de uno de los sitios donde se expende, entre otros productos, el conocido “putetón”, consistente en un plato con picadito de carne, dos huevos fritos y tortilla, una combinación de 15.000 guaranies muy recurrido por trabajadores.
Inicialmente los “chespis” (adictos al crack) asediaban con pecheos de monedas a los clientes y trabajadores del mercadito. Pero desde hace poco pasaron la raya y aplicaron el atraco directo, exigiendo el pago de dinero para transitar o concurrir al local de mercadeo.
El problema de los adictos al crack, se va expandiendo (inicialmente) desde la zona del Parlamento, hacia barrios de la capital lindantes o cercanos al centro. Esto a tal punto que la otrora concurrida calle Palma pasó a ser, en horario nocturno, en sitio poco recomendable para pasear.
A CUCHILLADA
Recientemente un episodio violento se verificó en el mercadito 1. La fiscal Diana Laterza imputó por el hecho punible de homicidio doloso en grado de tentativa a Melissa Alana Vera Santos. La mujer está sindicada de atacar con un arma blanca a otra mujer, en el sitio.
El hecho se registró cuando la víctima, junto a otras tres personas, se encontraba esperando el desayuno en el local.